miércoles, 23 de diciembre de 2009

Navidad Soul McDonald



En los últimos tiempos se han visto algunos discos de recopilación con lo mejor y más granadito del sello de color Motown Records. Grabaciones históricas de las que muchos hoy día aún tendrían algo que aprender, sobre todo cuando se trata de poner en marcha la cadena clónica de producciones en serie que nos adornan últimamente.

Aquellos muros de producción de Phil Spector fueron la sensación de la época, de los años sesenta, con el aroma de músicos de color que se auparon sin arrobo y con desparpajo en un mercado comandado por blancos.

Su fundador Berry Gordy consiguió 100 éxitos rotundos durante aquella esplendorosa década con músicos como Stevie Wonder, Marvin Gaye, The Supremes y Diana Ross, Jackson Five, etc., etc., con la inestimable colaboración del trío compositor Holland-Dozier-Holland.

El 50 aniversario resucitó durante 2008 parte de aquel legado inmortal. Pero al cabo otros músicos como el bueno de Missouri (EE.UU.) Michael McDonald educado en el R&B y el Soul en bandas como Steely Dan o Doobbie Brothers decidió volcarse hacia él en 2003 con un álbum llamado sencillamente Motown, en 2004 Motown Two y luego en 2008 con Soul Speak.

Auténticas joyas los tres que recogen temas inéditos sin perder de vista el R&B y Soul de su estilo clásico y su voz intransferible bajo la atenta mirada el siglo XXI. Es un buen músico este McDonald.

Ahí te dejo la versión del clásico For Once In My Life de Stevie Wonder. Y a continuación el cómo se puede hacer una versión del mismo Van Morrison y salir mejor que bien del envite, es el Into The Mystic.




sábado, 12 de diciembre de 2009

Blanca y Radiante


Blanca y radiante va, con ilusiones renovadas, henchida de ternura y amor. De la mano de sus miedos y esperanzas. Es tiempo de cambio, de buenos propósitos y la música nupcial también va realizando su trabajo camino del deseado advenimiento. Sí, es la Navidad.

Como la primavera, que tan lejos queda, ha llegado un año más sin saber cómo ha sido. Viene en nuestra busca y ya va anunciando que no cejará en el intento. A unos les toma por sorpresa, otros regatean su paso y los hay quienes disfrutan con ella.

Y armas no le falta. De pronto rostros que jamás viste a tan corta distancia del tuyo bañan sin disimulo la mejilla de arrumacos propios de la época y un deseo ferviente de prosperidad y felicidad aunque unos días antes apenas repararon en tu existencia.

Pero vale, los frutos del tiempo que anda ahora se recogerán en breve, en forma de agasajos materiales que para eso están las ciudades engalanadas. Muy bonitas, la verdad. Sobre todo en el atribulado Centro Comercial. ¡Qué chulos los establecimientos, como diciéndote 'no ves cuánto te quiero...'!.

No sé si el cambio climático habrá hecho tregua para esta temporada, tampoco sé siquiera si le han dado aviso de que estamos como estamos... pero sería bueno un cambio climatológico en calenturas varias.

En fin, que a mí esta misma mañana me han pasado el informe en el que se dice que ya es Navidad, ¿ a ti no?.


martes, 1 de diciembre de 2009

Música Inmóvil


Ahora resulta que el parque móvil de las ciudades debe ser inmóvil. Los ediles de turno han decidido eliminar de las calles de sus ciudades cualquier vehículo a motor para así facilitar el tránsito al sufrido peatón que no tiene aceras... por donde 'pasear', entiéndase mirar escaparates y consumir, eso sí, éstos a velocidad de crucero.

Argullen que la ciudad debe resultar más habitable, accesible y adaptada al centro comercial. Otra vez el consumismo. Suprimen aparcamientos y, claro, como los párking públicos o privados son insuficientes a todas luces y en ocasiones ninguno coincide en distancia aceptable con el establecimiento o mercado de turno... te fastidias cargado de paquetes hasta el apeadero de vehículos.

Es decir, todas las razones y argumentos para que dejes el coche en casa. Así no se estropea, das lustre a la ciudad y de paso que no contaminas no hay necesidad de eliminar tal o cual bache, sencillamente porque aunque seguirás pagando religiosamente el famoso 'sello' del vehículo no romperás la calzada.

Adiós a esos paseos sobre ruedas mientras escuchas una bonita música por los flamantes altavoces de tu no menos radiante automóvil a volumen suficiente sin exceder el habitáculo del mismo.

Adiós a esperar en la puerta del comercio a tu santísima que exhibe una radiante sonrisa tras de la cual puedes intuir el motivo.

Adiós a disfrutar de la ciudad en coche que es otra variante de asueto que se ha pisoteado en pos del adorno a veces infame de otrora calles espléndidas que han quedado reducidas a la más mínima y ridícula expresión urbanística.

Pero yo me resisto a mis paseos motorizados, ¡qué gusto cuando llueve!, diurnos o nocturnos. Me resisto a dejar el coche en casa, que todo utilizado con moderación es bueno ante el exceso de obstáculos impuestos por nuestros ayuntamientos. Así que ahí va una de música para coche y ciudad.